La medicina holística se basa en la creencia de que el amor y el apoyo incondicionales son el sanador más poderoso y que la persona es, en última instancia, responsable de su propia salud y bienestar.
"El único amor consecuente, fiel, comprensivo, que todo lo perdona, que nunca nos defrauda, y que nos acompaña hasta la muerte es el amor propio."
Oscar Wilde